Gracias a tod@s por sus buenos deseos.
Este inicio de ciclo es bastante interesante porque coincide con muchos cierres y aperturas a nivel personal, profesional y a nivel de mi entorno, de mi país y del planeta.
Apenas el primer día de la nueva vuelta al Sol ya me encontraba en mi amada Lomita, en un Círculo de Paternidades y Nuevas masculinidades, rodeado de energía masculina y femenina, de diferentes edades cronológicas, y en perfecta armonía, equilibrio y apertura emocional.
El desgaste físico, psicológico y emocional que venía sintiendo las últimas semanas parece haber sido una señal de transformación y de "muerte necesaria" de una parte de mi, que ya ha cumplido su misión acá, y que estoy dejando ir desde el amor y la gratitud.
En estos momentos siento que estoy vibrando en la misma frecuencia de los primeros días de mi vida. Siento que no es coincidencia que este año haya sido también un sábado, como el día de mi primer nacimiento en este cuerpo.
Agradezco cada uno de sus buenos deseos e intenciones. Lo crean o no, he logrado percibir sus vibraciones y su amor desde mi silencio y mi quietud.
Apenas hoy estoy leyendo uno a uno sus deseos y mensajes y algunas lágrimas han salido de mi reflexivo y agradecido corazón.
Algun@s "no están", pero mi amor y gratitud los sigue honrando en su ausencia, sea ésta impuesta o voluntaria. Gracias por haber caminado a mi lado un día, nunca lo olvidaré.
Confieso que aún no termino de salir de esta hermosa crisálida, por lo que aprovecharé cada uno de los segundos que aún me unen a ella para enfocarme y visualizar lo que quiero, no para mí, sino para cada uno de ustedes; para cada uno de los que sufren, dudan o sienten deseos de abandonar; para la Venezuela que me acogió en este plano existencial, y que está viviendo el mismo proceso de muerte y renacimiento; y para la Humanidad entera, que está cerca de ser consciente y testigo de su verdadera esencia y de su Unicidad...
Gracias.